Hoy se cumplen 88 años de la muerte de nuestra Madre Mariana, en este día queremos hacer memoria de su vida; Mariana movida por el amor a Dios se compromete con una realidad social concreta, y en clima de recogimiento se siente interpelada por la Palabra, y da el paso a entregar su vida por los descartados de la sociedad. Mariana sintiendo que el Señor la llamó a su servicio y confiándole la misión y carisma de fundar este Instituto para acoger a la juventud más necesitada, la acompañó con su gracia, en todo momento.
Ella sintiendo esa fuerza interior de la gracia, puso toda su vida en sus manos, y esto le permitió, que la misión y carisma de nuestro Instituto fuese muy fecundo. Damos gracias a Dios Trinidad por nuestra madre fundadora, por su ejemplo de vida y entrega a las jóvenes destinatarias de nuestra misión.